Los trabajadores de Alto Bierzo inician la convocatoria de huelga indefinida por la falta de compromiso de la empresa

Los trabajadores de Alto Bierzo han acordado este martes solicitar la convocatoria de una huelga indefinida motivada por los continuos incumplimientos de la empresa y administración concursal con relación a la incorporación de la plantilla. Desde el pasado mes de diciembre se han producido una serie de promesas relacionadas con los cupos de carbón que tenían tras de sí el compromiso que, una vez se solucionasen, volverían a contratar a la plantilla. Ahora se han puesto las cartas boca arriba y aquella palabra para reincorporar a la totalidad de la plantilla se reduce a tan solo cuatro mineros.

“Decepcionados, aunque más que decepcionados nos sentimos engañados”, criticó el presidente del comité de empresa de Alto Bierzo, Rubén Fernández, “ya que la última asamblea que tuvimos con ellos fue porque la dirección de la empresa nos trasladó que una vez hecho el acuerdo a seis bandas publicado en el BOE se incorporarían automáticamente los barrenistas y posteriormente el resto de gente, inclusive la gente de cielo abierto”.

Del dicho al hecho hay un trecho, a la vista del correo que recibió esta mañana la representación sindical: “nos dice que van a incorporar de forma inminente a un picador y a un ayudante minero para suplir las bajas del cepillo, y un ayudante barrenista y un ayudante minero en el momento que autoricen a meter explosivo”.

Los representantes de los trabajadores aseguran sentirse engañados, máxime cuando han sido ellos los encargados de hacer de intermediarios entre la empresa y administración concursal con sus propios compañeros. “Nosotros trasladamos la información que se nos da”, reprochó Fernández que no ocultó su profundo malestar y cansancio por lo que ha venido sucediendo en los últimos meses, pero en un contexto en que en los últimos dos años prácticamente no han entrado al tajo.

Y detrás de todo ello, el drama de las familias mineras que, en el mejor de los casos, aún mantienen una prestación por desempleo a punto de agotarse o un subsidio de poco más de 400 euros. “Por parte de los trabajadores ya no se les puede pedir nada más”, se mostró tajante Fernández.

 

Falsas esperanzas desde diciembre

Y es que desde el pasado 26 de diciembre se han producido diferentes puntos de inflexión que derivaron en falsas esperanzas, a la postre, para los mineros.

Primero, un error en el Boletín Oficial del Estado dejó sin cupo de carbón a Alto Bierzo. El administrador concursal, presente en la asamblea de Bembibre en la que estuvo presente la prensa, expresó su deseo de que se produzca un cambio “que permitiría reabrir el pozo Casares a principio de este próximo año” (transcripción literal de las declaraciones del administrador según la noticia publicada por Bembibre Digital el 26 de diciembre de 2013).

El Ministerio de Industria lo atribuyó a un error y el día 8 de enero procedió a la corrección en el BOE.

El 27 de enero los mineros convocaron una nueva asamblea porque la situación no había cambiado en absoluto. Sin embargo, la administración concursal les trasladó que sería inminente una vez finalizasen las verificaciones técnicas de seguridad, el mismo día 3 de febrero. El representante regional del sindicato Comisiones Obreras, Jesús Magadán, aseguró desconocer el número exacto de mineros que se incorporarían en un primer momento, aunque recordó que el total de la plantilla es de 60 trabajadores de interior. 

El día 3 nadie volvió a trabajar, pero un día más tarde se incorporaron cinco mineros que entraron en la mina como avanzadilla para revisión de instalación y maquinaria. Pero esta aparentemente buena noticia contrastó con que salían los 30 trabajadores de cielo abierto.

Aquel mismo día anunciaron que se habían producido unos problemas de facturación con Endesa derivados de las mezclas de carbón, ya que no había carbón de interior y el mineral de exterior contiene un mayor porcentaje de humedad, más ceniza y azufre.

A finales de febrero la empresa anunció la incorporación de los trabajadores de cielo abierto para el día 3 de marzo con el objetivo de intentar retomar la actividad extractiva con normalidad. Y fue fruto de un acuerdo a seis bandas para la modificación de cupos y asignación de carbón de tal modo que una parte del mineral de interior de HBG pudiera mezclarse con el carbón de exterior de Alto Bierzo para conseguir mezclas homogéneas.

Pero la comisión de seguimiento del Plan del Carbón a principios de abril no traería buenas noticias y el Ministerio comunica su indisposición a modificar el Real Decreto para la reasignación de cupos. El sindicato Comisiones Obreras consigue reunirse con el secretario de Estado de Energía Alberto Nadal que cambia de parecer.

El día 11 de abril nueva asamblea en que la administración concursal transmite la situación a los trabajadores, y asegura que, de no proceder con la reasignación de cupos, liquidaría Alto Bierzo en un plazo de 10 días.

Pero la corrección por parte de Industria llevaba implícito un compromiso de la empresa con sus trabajadores, recordó la parte social, que no es otra que la incorporación de la plantilla paulatinamente: primero los barrenistas y posteriormente el resto.

Ahora el último mazazo es que, a pesar de que Industria cumplió con su parte, los trabajadores siguen igual o peor. Tal es así que en la asamblea de hoy el sentir generalizado es que han estado jugando con ellos a la vista de los acontecimientos, y ya no ocultan su cansancio por los hechos.

“Ahora mismo la papeleta la tienen entre la empresa y el administrador”, recordó Fernández esta tarde. “Si nos dicen que tendrían que empezar los barrenistas, es lo que tiene que darle traslado el administrador”, reprochó.

Y, ante la falta de acuerdo, de momento comienza la tramitación de una huelga con la papeleta ante el Serla que, sin acuerdo, llevaría a la paralización en la práctica de los trabajadores.

 

Corte de carretera que une Torre con Tremor

El conflicto de la minería aún sigue latente a la vista de la protesta que escenificaron esta mañana un grupo de encapuchados que obligaron al chófer de un camión de carbón a volcar la carga en la carretera LE-460, entre Torre del Bierzo y Tremor de Arriba. A consecuencia de estos hechos, la carretera permaneció cortada un tiempo hasta que procedieron a su limpieza.

Los hechos tuvieron lugar sobre las nueve de la mañana en las inmediaciones de las explotaciones de Alto Bierzo. El presidente del comité de empresa aseguró que «estamos en contra de toda movilización y altercado que esté fuera de la ley».

 

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