Esta vez no pudo ser como en años anteriores, pero si hay algo que permanece invariable es la ilusión ante la visita de los Reyes Magos y el Hada de las Nieves a Bembibre. Especialmente entre los más pequeños.
Melchor, Gaspar y Baltasar recorrieron las principales calles en la Cabalgata que se caracterizó por el distanciamiento propio de la pandemia: saludos en la distancia, sin caramelos y con un recorrido más corto que finalizó en la plaza Santa Bárbara sin fiesta posterior.
Este año con una participación menor, visible en la calle Susana González y en la plaza Mayor, pero que congregó a un número superior en la parte final del recorrido. No sólo la situación sanitaria fue un obstáculo, también la lluvia aunque al inicio de la Cabalgata, desapareciendo sobre la marcha.
Por lo menos este año volvió la Cabalgata a Bembibre y el recorrido de los Reyes, a pie de calle, antes de la visita de rigor que esperamos esta noche.
