Visitamos las instalaciones deportivas de “El Barco” donde nos recibe Saúl Blanco, director deportivo del Atlético Bembibre. Una figura muy importante en el fútbol moderno, ya que es el eje sobre el que gira la confección de la plantilla. Mientras charlamos, Carlos Tornadijo dirige una nueva sesión de entrenamiento bajo la atenta mirada de algunos aficionados.
En pocas palabras, ¿en qué consiste el trabajo de un director deportivo?
El director deportivo es una figura que cada vez ha ido cobrando mayor importancia en el fútbol actual. Tiene varias funciones, pero tratando de ser breves, podemos decir que dentro del organigrama deportivo de un club de fútbol es quien se encarga de confeccionar el proyecto a corto y medio plazo, y de hacer de nexo de unión con la directiva.
Antes de nada cuéntanos como ha sido tu trayectoria en el Atlético Bembibre
Mi evolución personal dentro de la estructura del club ha sido muy grande, desde que en 2011 me incorporé a la directiva y estuve pegando carteles para anunciar los partidos, hasta que en 2019 asumí una responsabilidad importante planificando la plantilla, y ya este año con capacidad plena de decisión.
Verano es sinónimo de vacaciones. ¿Para ti también?
Cuando termina una temporada hay que ponerse a preparar inmediatamente la siguiente, y aunque el trabajo de director deportivo no tiene nada que ver con el que se desarrolla en clubs profesionales de Primera o Segunda División, o incluso en clubs de categorías como la 1ª y 2ª RFEF, este año el verano ha sido muy movido. También es verdad que se trata de una labor que me gusta, así que he dedicado parte del tiempo a formarme, realizando un curso relacionado con la dirección deportiva de clubs de fútbol y otro sobre Big Data
A la hora de confeccionar la plantilla por dónde comenzamos ¿Cuál es el primer paso?
En primer lugar tenemos que tener claro cuáles son los objetivos que queremos alcanzar durante la temporada. Luego hay que valorar con qué contamos y qué necesitamos para alcanzar esos objetivos. Este año en concreto, el primer paso era la contratación de un entrenador para dirigir el nuevo proyecto.
Pues hablemos del entrenador. Carlos Tornadijo es un técnico reconocido con varios ascensos en su curriculum. ¿Era el tipo de entrenador que se buscaba desde el primer momento, el primer nombre de la lista?
Cuando me reuní con el presidente para comenzar a planificar la temporada, me dijo que este año el Bembibre tenía que hacer algo importante. Carlos Tornadijo era uno de los de la lista, pero con esa premisa… desde ese momento se convirtió en el único
¿Fue difícil convencerlo para que viniera a Bembibre?
Fácil no fue. Tornadijo es un entrenador con un curriculum envidiable, y con un gen ganador que queríamos que se lo contagiase a la plantilla. Pero había que dejar claro que el Club también iba a trabajar en esa dirección, para que finalmente se decantara por la opción del Atlético Bembibre.
A partir de ahí toca confeccionar la plantilla. ¿Las renovaciones y las bajas estaban decididas ya o tuvo algo que ver en ello el nuevo entrenador?
Había bajas que estaban decididas antes, independientemente de quien fuera a ser el entrenador. Luego hubo otras consensuadas por ambas partes, que para mí fueron las más duras. Nunca es agradable decirle a un jugador que no va a seguir en el Club.
Supongo que tendrías claro los puestos que era necesario reforzar, pero ¿Hubo alguna petición expresa de Carlos Tornadijo? ¿Algún jugador en concreto que considerara imprescindible?
La verdad es que no. Cuando hablé con él le expliqué el proyecto y lo que el Club pretendía. Ahí ambos ya sabíamos los jugadores que tenían que venir al Bembibre.
En estos dos últimos años se han recuperado jugadores formados en el Club como Roberto Puente, José Manuel, Jhony, Marcos… o que dieron aquí sus primeros pasos en categoría nacional como es el caso de Javi Amor. ¿Es algo premeditado o casualidad?
No, no es casualidad. Es uno de los puntos del proyecto que le planteé al míster. El Club tenía que recuperar a esos jugadores que por unas razones u otras se habían marchado, e incorporar a otros jugadores importantes de la comarca. En cierta medida creo que se ha conseguido.
¿Estás satisfecho con el resultado final? ¿A qué crees que puede aspirar esta plantilla?
Yo personalmente estoy muy satisfecho, porque durante el verano ha habido momentos muy complicados y ahora, viendo esta plantilla, ves recompensados los esfuerzos.
Pueden aspirar a lo que ellos quieran. Es una gran plantilla con gran experiencia en la categoría y verlos entrenar es una maravilla. Además, como todos se conocen, han congeniado muy bien en el vestuario desde el principio. Hay un gran ambiente de trabajo y estamos muy contentos con todos ellos porque somos como una gran familia. Hay buena comunicación entre plantilla, directiva y cuerpo técnico, y eso es básico y primordial.
Llevas ya 10 años en el Club, un largo periodo de tiempo con espacio para la tristeza y para la alegría. ¿Qué momento destacarías de todo este tiempo?
Recuerdos alegres del Bembibre tengo desde muy niño, cuando con 5 o 6 años Ateca, el cartero, me llevaba con su hijo todos los domingos a Los Juncos. También recuerdo cuando me reclutaron para los benjamines con solo 7 años y aún no podía competir. De aquella no existía la categoría de prebenjamín , pero Fermín consiguió convencer a mi madre para que me dejara ir con niños más mayores a entrenar al “Picadero”. Iba yo más contento con mis marco… (risas)
Los momentos tristes tratas siempre de olvidarlos, aunque es inevitable mencionar el día en que “Minis” sufrió el ictus, del que afortunadamente se ha ido recuperando, o más recientemente la pérdida de “Oli”, a quien le tengo que agradecer lo mucho que me ha ayudado.
Recuerdo también, como un momento muy emotivo, el “respetuosísimo” minuto de silencio que toda La Devesa guardó por mi mujer. No me lo esperaba porque en esa época, aunque formaba parte de la directiva, no era ni un directivo importante ni un miembro destacado del Club.
Para finalizar, ¿qué proyectos tienes de futuro?
Quiero seguir formándome en materias relacionadas con la dirección deportiva, y también tengo un proyecto en marcha con Claude y Didier Anelka, hermanos y representantes de Nicolas Anelka, para la creación de una academia internacional de futbolistas, de jóvenes talentos, en Bembibre
Muchas gracias, y mucha suerte