Durante los próximos días, desde la mañana del 4 de agosto hasta el 6 de los corrientes, se espera que una masa de aire caliente en altura, a 850HPa, de más de 25º encima de la península afectando a Castilla y León en su totalidad. Esta masa trae consigo un aumento en la severidad atmosférica de cara al riesgo de incendios, caracterizándose por:
• Incremento de las temperaturas máximas.
• Moderado incremento de las temperaturas mínimas nocturnas.
• Ausencia de precipitaciones, salvo fenómenos tormentosos difíciles de predecir.
• Vientos de componente suroeste cercanos a los 20 kilómetros por hora.
• Inestabilidad atmosférica muy alta con posibilidad de originar vientos racheados.
Estas circunstancias meteorológicas incrementan el estrés hídrico de la vegetación, con incremento de la desecación del combustible seco y disminución de la humedad relativa edafica y atmosférica favoreciendo el inicio y posterior propagación de los incendios, agravado además por la sequía que ya arrastra la vegetación debido a la escasez de precipitaciones de esta primavera.
Ante esta situación las medidas de seguridad en la extinción deben extremarse, el Operativo de lucha contra incendios ha de estar en máximo estado de alerta y se deberá extremar las medidas preventivas.
Por todo ello desde la Junta se recomienda la máxima prudencia a toda la población y que eviten el uso del fuego.