A CIENCIA CIERTA / Los tajos y las calles de la mina

Puesto que la minería del carbón en El Bierzo es prácticamente sólo un recuerdo, de recuerdos va este artículo. Los trabajadores de las minas y en especial los picadores estaban muy familiarizados con el significado de los tajos y las calles de las ramplas o talleres de arranque. Cuando una capa estaba “bastante colgada”, es decir cuando tenía una pendiente considerable (un buzamiento) el carbón caía por gravedad a la parte más baja de la explotación. Esto solía suceder para buzamientos de 40º para arriba.

Al realizar las labores de arranque los picadores iban picando el carbón “tirando a plomo” es decir en la dirección de la pendiente máxima y en forma de escalera. Cada cierta distancia subida “a plomo” que a menudo eran 7,5 metros es decir 3 alturas de 2,5 m. cada una, se producía un cambio de prácticamente 90º ya que la forma del frente de explotación seguía una línea prácticamente horizontal. Se avanzaba “en llano” y no “a plomo”. De este modo la forma del taller o la rampla parecía una escalera muy similar a la de la figura. Si la longitud de las alturas (tajos) se medía por los bastidores (maderas de 2,5 metros de longitud), la de las calles se media por la separación entre bastidores que solía ser de unos 90 cm.

Con estos datos y algún detalle adicional era posible realizar simplemente tomando nota de los tajos y las calles, un plano de la explotación que repito era muy similar al de la figura que acompaña este texto. Este era un plano a muchos efectos válido; pero era un plano sobre el plano de la capa. En los planos de labores de la mina los planos eran proyecciones sobre un plano horizontal. Es lo habitual en cualquier plano. Por tanto era necesario saber la equivalencia entre un plano sobre la capa y un plano en la horizontal. Veamos la figura una vez más. Una imagen vale más que mil palabras.

En este taller hay 17 tajos, luego su longitud a plomo son 42,5 metros. El avance de la explotación de la cabeza a la base es de 18 calles que a 90 cm cada una de promedio habrían de ser 16,2 metros. Pero este dato se podía contrastar por otros caminos más fiables y en este caso vamos a suponer que fuese de sólo 14,4 m. ¿Qué nos dicen estos datos?. Pues (trigonometría básica) que el ángulo medio del taller con respecto a la pendiente máxima es de 18,72º. Dicho de otro modo que midiendo en sentido de las agujas del reloj la línea A-B forma 18,72º con la dirección de la pendiente máxima de la capa. Pero sobre un plano horizontal no serán 18,72º,si no otra magnitud que es la que se necesita saber. A esta magnitud le llamaremos incógnita 1

Ahora supongamos que sabemos que la capa tiene una pendiente de 60º.Era sencillo saberlo a partir de los planos de labores de la mina. Como la línea A-B no sigue la pendiente máxima es evidente que la pendiente de la línea A-B será inferior a los 60º. Pero ¿que magnitud exacta?. Es otro dato que necesitamos saber. Es la incógnita 2.

Tanto una como la otra de las incógnitas las podemos conocer mediante unos cálculos de trigonometría elemental que se utilizan con frecuencia en geología estructural. No voy a detallar aquí el método de cálculo pero es muy simple. Si daré el resultado por si alguien se quiere molestar en comprobarlo. El valor de la incógnita 1 es 34,12º y el de la 2, es 58,6º es decir la pendiente A-B.

Operaciones de este tipo era preciso realizarlas a menudo, yo diría que de modo rutinario, en la mina para el correcto seguimiento de las labores. Lo curioso es que el desarrollo matemático utilizado en las mismas se puede aplicar a otros campos como el diseño de relojes de sol o las técnicas de fotogrametría, que permiten levantar planos correctos del terreno o de cualquier objeto (indicando también cotas o desniveles) a partir de fotografías. Al final y como por otra parte es conocido todas las áreas del conocimiento están más o menos intercomunicadas.

Rogelio Meléndez Tercero

 

 

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