Una de las principales novedades de estas fiestas será el cambio de ubicación de la tirada de fuegos artificiales, que no será, al menos este año, en la alameda del Santo. La razón de ser, según explicó la concejala de Fiestas, Belén Martín, es la falta de autorización en la ubicación tradicional.
Además de la explicación en la rueda de prensa, el Ayuntamiento de Bembibre, a través de sus redes sociales, informó que “cada año pedimos la oportuna autorización a la Junta de Castilla y León y a todas las fincas colindantes a la que se ubica la tirada, que es propiedad del Ayuntamiento”, pero asegura “para nuestra sorpresa” que la única que, este año no ha dado autorización “ha sido la Cofradía del Santo Ecce Homo, por primera vez en la historia de nuestra Villa”.
“Sin este requisito no podemos tirar los fuegos desde allí y, para nuestro disgusto, nos hemos visto obligados a romper la tradición y los veremos desde el Paseo de Carrizales”.
No obstante, fuentes de la Cofradía del Santo Ecce Homo han asegurado a Bembibre Digital que esta institución no ha denegado dicha autorización. “Nunca se ha denegado nada por parte de la Cofradía, los terrenos de los aledaños del Santuario no son propiedad del Ecce Homo”, aseguraron estas mismas fuentes, rechazando su participación en esta decisión.
Desde el Paseo de Carrizales
Muchas personas acuden por inercia el día de los fuegos hasta el Santo, pero en esta ocasión hay que tomar dirección paseo de Carrizales, en las inmediaciones del río Boeza. Ésta será la ubicación desde donde se lanzarán los fuegos artificiales el primer día de fiestas, el miércoles 17 de septiembre, a las 12 de la medianoche.
La concejala lamentó que este año no haya autorización, contrariamente a lo que sí venía autorizando los años anteriores.
Si bien no es habitual la tirada de fuegos artificiales desde el Paseo de Carrizales, lo cierto es que ya hubo experiencias previas en los momentos en que había presupuesto hasta para tres días de fuegos, como llegó a ver la población de Bembibre hace dos décadas. Entonces se apostó, además de la tirada tradicional del Santo, por el paseo de Carrizales y por la Corona (hoy impensable por el alto riesgo de incendio).