El Tribunal Supremo ha suspendido hoy martes de forma cautelar el toque de queda a las 20 horas que decretó hace un mes la Junta de Castilla y León.
Se trata de una medida cautela mediante auto que no entra a valorar el fondo de la cuestión, sobre la que deberán pronunciarse los magistrados en una sesión posterior.
Esta resolución, que tiene efectos inmediatos, implica que los ciudadanos podrán regresar a sus domicilios a las 10 de la noche desde hoy mismo.
Una decisión que se esperaba la pasada semana pero que se ha demorado durante siete días más, tras la denuncia del Gobierno que solicitó a la Abogacía del Estado su recurso.
Consideraban que la medida autonómica infringía el decreto del estado de alarma.