Transcripción literal del comunicado del grupo Socialista
Por si aún quedaba alguna duda acerca del electoralismo barriobajero que practica Otero, ahora resulta que no solo va a poner en marcha la estación de autobuses con fondos propios, sino que por ello va a dejar de pagar a los vecinos de San Román las expropiaciones de terrenos que tiene todavía pendientes en la tercera fase del polígono industrial.
Lo primero quiere disfrazarlo con dos aportaciones externas. Dice que el Ayuntamiento completará una primera fase de 240.000 € para la estación de autobuses y el resto hasta el total de 600.000 € lo pondrán la Junta de Castilla y León con 200.000 € y la Diputación de León, con otros 160.000 €. Son las mentiras y los cuentos de siempre.
La única verdad es que –a pesar de que la Junta tiene la obligación de financiar la totalidad de la inversión– los 200.000 € no aparecen consignados en su proyecto de presupuestos para 2015 en ningún sitio y los 160.000 € de la Diputación se van a obtener renunciando a otras obras que le corresponderían a Bembibre en los dos próximos planes provinciales, con lo cual no se va a emplear el dinero de esas subvenciones en infraestructuras de primera necesidad para el municipio, sino en satisfacer el ego personal de Otero, presumiendo de que así cumple su promesa electoral.
Nos parece una tomadura de pelo y un fraude a las expectativas de la gente que una actuación de la que se beneficia todo el Bierzo Alto se haga recaer única y exclusivamente sobre los bolsillos de los bembibrenses. Y nos parece mucho peor cuando Otero se postulaba para alcalde de Bembibre a base de presumir que él sí sabía dónde estaban las llaves que abrían las puertas del dinero de la Junta.
Mucho más grave y una auténtica golfada nos parece que, después de tres años y pico de inactividad, a Otero se le ocurra abordar esta obra inmediatamente antes de las próximas elecciones municipales. Otero es consciente de que no tiene ningún logro que presentar a los ciudadanos de Bembibre y ahora pretende promocionarse a nuestra costa, es decir, haciéndonos pagar la estación de autobuses para que esta disimule y maquille su nefasta gestión municipal. Una maniobra tan burda se ve a la legua y sin duda se volverá contra quien la realiza.
Por lo pronto ahí tenemos a los propietarios de los terrenos de San Román, a los que Otero les lleva prometiendo desde el principio de la legislatura que cobrarían hasta el último céntimo, y ahora les dice que no hay dinero para pagar las expropiaciones al precio fijado oficialmente de 8,9 €/m2 y que solo podría pagarles a menos de la mitad. Para él es menos importante dejar de pagar y seguir generando intereses que empezar la estación de autobuses.
Pero no solo es esto. Es que, para que Otero pueda sacar pecho, todos los vecinos de Bembibre, que ya nos privamos de iluminación y limpieza en las calles, y del mantenimiento de nuestras necesidades más básicas, vamos a tener que privarnos en lo sucesivo de todo tipo de realizaciones que mejoren nuestra calidad de vida.
Una vergüenza que debería abochornar a Otero, que nunca pensó llegar tan alto. Ni Bembibre imaginó nunca caer tan bajo.
{jomcomment lock}
