Transcripción literal del comunicado de prensa del PSOE
El espectacular remanente de tesorería que acaba de hacerse público no demuestra, como lo presenta Otero, que sea consecuencia de “una gestión minuciosa y detallada de los recursos municipales”, sino todo lo contrario. Lo que demuestra es un inadmisible desequilibrio entre los ingresos y gastos municipales, así como un total desconocimiento de lo que es la gestión pública, encaminada siempre a la prestación de servicios a la ciudadanía.
Para entendernos, el remanente de tesorería es la diferencia que hay entre el dinero que se tiene y el dinero que se debe. Si en nuestro caso el presupuesto real del ayuntamiento está cifrado en torno a 7.000.000 de euros y el remanente asciende a casi 2.200.000 euros, esta cantidad supone el 30% del presupuesto. Es una barbaridad, porque significa que Otero no sabe qué hacer con un euro de cada tres que gestiona. O dicho de una manera más clara, está recaudando mucho más de lo que necesita.
Lo venimos denunciando desde que Otero es alcalde. Las subidas de impuestos y tasas que ha aplicado no tienen ninguna justificación. Es el caso del 24,04% de la tasa de depuración de agua, del 80% del agua potable, y del 30% del IBI. Ahora nos viene con el cuento de que, si le autoriza Hacienda, puede rebajar un 40% el recibo del agua. Lo que tenía que haber hecho es no haber subido NUNCA ese recibo, porque, si ahora tiene un remanente de dos millones de euros, esa es la prueba de que el ayuntamiento perfectamente podría haber asumido el total del coste de la subida, cercano a 370.000 euros por año. Y lo mismo pasa con el IBI, que ahora nos trata de engañar solicitando una bajada del 10%, cuando previamente lo ha subido el 30%. Lo que tenía que haber hecho es no haberlo subido nunca. Y qué decir de la tasa de depuración, que Otero creó y aprobó en 2012, del 24,04% para ese año, con la promesa de bajarla en lo sucesivo al 12%, algo que no se ha producido hasta el día de hoy. Y seguimos esperando.
Pero tampoco se ha gastado en lo que había que gastar, en lo necesario para Bembibre. Y no hay más que dar una vuelta por nuestro municipio para verlo: falta iluminación, falta limpieza, falta mantenimiento de parques y jardines, faltan unas fiestas dignas, faltan actividades culturales, en definitiva, falta todo de todo. Lo venimos denunciando cada vez que se aprueba el presupuesto, se incluyen una serie de inversiones que son siempre las mismas y que nunca se ejecutan. Solo se ponen para engordar el presupuesto. Y mientras tanto, nuestro municipio va de mal en peor.
Otero demuestra su talla política sacando pecho por presentar un remanente de tesorería de dos millones a costa de abrasar el bolsillo de la ciudadanía y cree que con tener dinero ahorrado en el banco es un buen gestor, cuando lo que necesita Bembibre es una prestación digna de servicios, y unos impuestos ajustados a sus necesidades, algo que, al hilo de las palabras de Otero, no existe en la actualidad.