La Comisión de Seguimiento del Plan del Carbón terminó ayer después de cinco horas sin acuerdo con el mismo planteamiento de las partes: el Gobierno no cambiará su postura, confirma la reducción de las ayudas al funcionamiento un 63% y los sindicatos anuncian una primavera caliente. La reunión se rompió prácticamente en el mismo momento en que el secretario de Estado de Energía, Fernado Martí, abandonó la mesa sin esperar a la finalización de la misma, que se prolongó dos horas más en su ausencia.
El secretario regional de la Federación de Industria de UGT, Manuel López, calificó el encuentro como un “rotundo fracaso” y atribuyó la responsabilidad al Gobierno que reafirmó “punto por punto” las mismas declaraciones que el Ministro transmitió hace una semana.
Parece claro que a partir de ahora no va a haber marcha atrás y que habrá una reducción de las ayudas del Gobierno que según las partes social y patronal supone en la práctica la defunción del sector minero.
Los sindicatos aseguran que han intentado hasta el último momento firmar un acuerdo pero acusan al Ejecutivo de “haber todo” toda posibilidad al abandonar la mesa.
Por otra parte, considera que de esta forma el Gobierno del PP ha hilvanado una “estrategia” para el cierre de las explotaciones.
A partir de este momento se esperan protestas del sector en la que se presenta como la peor crisis desde por la que ha atravesado la minería en el último cuarto de siglo. Patronal y sindicatos consideran que el sector ya no tiene futuro.
