El Atlético Bembibre recibía a uno de los grandes favoritos para el ascenso directo, el CD Guijuelo, que llegaba a esta cuarta jornada, al igual que los bercianos, sin conocer la derrota. Los charros dieron muestra de su gran potencial ante un Atlético Bembibre que hoy no firmó su mejor encuentro, pero que a pesar de todo le puso las cosas muy difíciles al conjunto salmantino.
Los jugadores del Atlético Bembibre salieron al terreno de juego con una camiseta de ánimo a Davo, intervenido recientemente de cruzado y menisco. Una lesión que lo tendrá apartado del terreno de juego durante toda la temporada.
Se adelantó el Bembibre por medio de Valentín, que está en un momento dulce, a gol por partido. Fue en una asistencia de Ivanildo, que dejó solo a Valentín frente a Johan, y el delantero no perdonó.
El Guijuelo necesitaba reaccionar y lo hizo metiendo una marcha más y aprovechando las imprecisiones de los atléticos para poner cerco a la portería de Ivanildo, hasta que Kenateder conseguía igualar el marcador. Los salmantinos mantuvieron el control del juego hasta el descanso y dispusieron de alguna ocasión para darle la vuelta al marcador, que Ivanildo y la defensa consiguieron anular.
Manolo Pérez introdujo dos cambios en el descanso, Jorge y Manu Arias, propiciando que el Bembibre tuviera un mayor dominio de balón en el inicio del segundo periodo. Pero el Guijuelo, que supo aprovechar muy bien los errores en el pase de los bercianos, quizá fruto de la presión en algunos jugadores muy jóvenes, acabó tomando de nuevo la iniciativa, aunque ya sin tanto empuje.
Los charros habían gozado de ocasiones para darle la vuelta al marcador, aunque la falta de acierto o las buenas intervenciones de Ivanildo, lo habían impedido. El gol terminó llegando, pero de forma antirreglamentaria. Centro al área que un jugador del Guijuelo toca en el segundo palo para que Alberto, en situación de fuera de juego, empuje el balón a la red. El propio jugador, consciente de su posición, miró al juez de línea antes de celebrar el gol.
El Bembibre trató de buscar el empate, pero la gasolina ya estaba muy justa. Incluso el Guijuelo pudo sentenciar en dos contras muy claras que no consiguieron finalizar. El oficio de los salmantinos, que no permitieron que se jugara prácticamente nada en los últimos minutos, cerró el partido y los puntos viajaran para Guijuelo.
Un resultado es justo si nos atenemos a los méritos futbolísticos. Pero el fútbol, como cualquier otro deporte, es acierto y error. En esta ocasión el acierto lo puso Ivanildo, desbaratando las ocasiones del Guijuelo, alguna de ellas muy clara, y el error fue del colegiado y de su juez de línea, que dieron validez al gol de la victoria visitante en fuera de juego.