Cuando se cumplía la media hora de juego del partido que enfrentaba este domingo en Salamanca al Atlético Bembibre con el CD Ribert, Pelayo Avanzini comenzó a sentirse mal y se sentó sobre el césped para ser atendido. Miñambres decidió cambiarlo de inmediato, por precaución, ante lo que podía parecer un corte de digestión.
Al finalizar el partido, con la victoria del Atlético Bembibre, Pelayo se despidió de sus compañeros para dirigirse directamente a Asturias junto a su padre, aprovechando los dos días de descanso de carnaval. Una vez allí volvió a encontrarse mal y acudió al Hospital Central de Asturias en Oviedo, donde quedó ingresado.
Después de realizar varias pruebas fue diagnosticado de miopericarditis, por lo que tendrá que estar al menos un mes sin hacer ningún tipo de actividad. Este jueves se someterá a una ecografía para descartar cualquier otro tipo de dolencia.
Pelayo Avanzini llegó esta temporada al Atlético Bembibre con tan solo 19 años, procedente del CD Covadonga, con quien ya había disputado algunos partidos en Segunda B. Después de un inicio de temporada con poco protagonismo, ha ido creciendo hasta convertirse en un jugador fijo del once inicial, por lo que su ausencia será muy importante para el equipo.
Avanzini sigue ingresado a la espera de más pruebas y de los resultados finales, pero lo que más le preocupa es no poder ayudar a su equipo en un momento importante en que está peleando por el play off de ascenso.
Desde aquí nos sumamos al deseo de sus compañeros, cuerpo técnico, directivos y aficionados, para que se recupere muy pronto y pueda volver a disfrutar jugando al fútbol lo antes posible. El mejor homenaje que se le puede hacer ahora mismo es ganar el próximo domingo a la Arandina, para dedicarle la victoria.
