Entendemos por geodiversidad el conjunto de los diversos elementos de una región que tienen relación con la geología, es decir sus rocas, sus minerales, sus fósiles, sus estructuras geológicas,… Varias circunstancia de nuestro presente hacen que el patrimonio geológico de una región adquiera cada vez más protagonismo. Entiendo que es una señal más de que el nivel medio de cultura y conocimientos de nuestra sociedad es cada vez mayor.
El patrimonio geológico que en la práctica es un concepto similar al de geodiversidad es importante al igual que lo es por ejemplo el patrimonio arquitectónico (monumental) de una ciudad o de un país. Hace siglos sin duda alguna no se concedía importancia alguna a la conservación del patrimonio monumental. El célebre Coliseo Romano se utilizó como cantera para construir otros edificios que en muchos casos podían ser casas sin importancia. Hoy en día todo es diferente y nadie (o más bien casi nadie); duda de la importancia de conservar los monumentos del pasado. Ahora bien el patrimonio monumental no es lo mismo que el patrimonio geológico y por ello quizá hay quien pregunte las razones por las que es necesario conservar el patrimonio geológico. Pues voy a intentar explicarlo.
Es una realidad que las rutas de senderismo por ejemplo que tan de moda se están poniendo dada la vida tan sedentaria y carente de ejercicio físico que hacemos; adquieren cada día una mayor importancia. Hace algunas décadas y más aún hace algunos siglos los problemas derivados de la escasez de ejercicio físico pasaban desapercibidos; pero no hoy día. Cada vez hacemos menos ejercicio físico por razones bien conocidas (automóviles, trabajos de escaso esfuerzo físico,…) y esto acaba repercutiendo en nuestra salud. Con las rutas de senderismo se intenta paliar esta ausencia de ejercicio, pero para animar al personal a pasear hay que ofrecerle algo interesante para ver en el trayecto. Este “algo interesante” pueden ser restos arqueológicos, parajes de singular belleza o también porque no, puntos de interés geológico.
Por otra parte los museos donde se exponen minerales o fósiles también son una importante contribución para el incremento de la cultura y el conocimiento de la sociedad. En Bembibre y desde hace más de 10 años funciona una conocida asociación mineralógica (Aragonito Azul) cuya actividad es ampliamente conocida dentro y fuera del Bierzo. Esta asociación con estrechos vínculos con el patrimonio geológico ha organizado numerosas actividades entre las que se incluyen salidas al campo que sirven para aprender geología y hacer ejercicio físico.
En Salas de los Infantes (Burgos) desde hace años funciona una asociación cultural que nació con la finalidad (entre otras) de dar a conocer al público en general el mundo de los dinosaurios aprovechando los restos de estos animales extinguidos hace millones de años, que abundan por aquella zona. Aunque no conozco con detalle las actividades de esta asociación supongo que serán muy similares a las que hace Aragonito Azul en El Bierzo; con la única diferencia de que en Burgos las actividades culturales y de estudio e investigación se deben focalizar sobre todo en el mundo de los precitados y extinguidos animales. Por cierto, en El Bierzo es imposible hallar huellas de dinosaurios ya que las huellas de estos sólo es posible encontrarlos en terrenos de la Era Secundaria y este tipo de terrenos no existen en El Bierzo. No obstante existir sin duda existieron; pero los terrenos en los que los dinosaurios dejaron sus huesos o sus huellas; no se han conservado en El Bierzo hasta el presente. Tenemos aquí terrenos de la Era Primaria y de la Terciaria; pero los de la Secundaria han desaparecido por la erosión.
GEOPARQUES
Un geoparque es un territorio más o menos extenso que contiene un patrimonio geológico destacado. En España hay hasta el momento unos 12 geoparques. Estos geoparques lo que pretenden es fomentar la cultura y también contribuir al desarrollo sostenible de las zonas donde se ubican. Este desarrollo sostenible se puede basar en el turismo.
Lógicamente la constitución de un geoparque requiere una serie de trámites que yo desconozco; aunque entiendo que el primero de ellos es la realización de un inventario detallado y justificado de puntos de interés geológico de la zona en la que se pretende ubicar el parque. Hasta donde yo se no hay ninguno en la provincia de León; ni siquiera en toda la Comunidad Autónoma de Castilla y León.
OTRAS FACETAS
Como es bien sabido España cuenta con un impresionante patrimonio arquitectónico. En la provincia de León se halla una parte significativa representada entre otros monumentos varios por las catedrales de León y Astorga. La conservación de este rico patrimonio arquitectónico y cultural requiere conocer por ejemplo la naturaleza de las rocas que se utilizaron en su construcción, para proceder a las necesarias labores de restauración de las partes de los monumentos que el paso del tiempo deteriora. Es esencial localizar las canteras que hace siglos sirvieron para la construcción de estos monumentos. De este modo se pueden sustituir las zonas dañadas por rocas similares a las originales y además el estudio de estas rocas puede resultar de gran interés para acometer labores de conservación.
No viene al caso describir ni siquiera hablar de las técnicas utilizadas en tareas de conservación. Es un tema sobre el que me estoy ahora informando; pero entiendo que es preciso en primer lugar conocer muy en detalle la composición de las rocas utilizadas en esos monumentos y comparar el aspecto de rocas frescas salidas de las canteras abandonadas con las que llevan siglos expuestas a la intemperie.
EL PLIEGUE ZALESKI
En la carretera N-1 en el p.k. 48,700 en dirección a Burgos, existe un punto de interés geológico (ver figura) conocido como el Pliegue Zaleski. Un pliegue es una capa o un conjunto de capas que están digamos “dobladas” o plegadas. Dada la proximidad a Madrid este espectacular pliegue fue un punto de visita obligada para muchas promociones de estudiantes de geológicas. Yo mismo recuerdo hace ya unos 40 haberlo visto siendo estudiante.
En el año 1986 las proyectadas obras de reforma de la carretera N-1 pusieron en peligro la existencia de ese pliegue. Entonces el Instituto Geológico y Minero y creo que también el Colegio de Geólogos advirtieron de ese peligro y finalmente se diseñaron las obras de modo que esa curiosa y singular estructura geológica se conservase. Para ello fue preciso hacer una ligera modificación del trazado de la carretera.
En la Red se halla cumplida información sobre esta singular estructura geológica. La imagen que adjunto está precisamente tomada de una página de la Red. Se halla en el término municipal de Venturada (Madrid) y en la información que precisamente en la Red se puede consultar acerca de este municipio, hay referencias a esta “peña” que seguramente durante siglos pasó totalmente ignorada por los lugareños y por los viajeros que por allí pasaban.
Queda por aclarar el curioso nombre de este pliegue. Podría parecer que la palabra Zaleski, hace referencia a algún destacado geólogo; pero nada más lejos de la realidad. Hace décadas la palabra Zaleski hacía referencia a alguna marca de ropa o estilo de vestir. En este singular pliegue alguien tuvo la ocurrencia de pintar en grandes letras la leyenda “ZALESKI ESTILO”. Los estudiantes que año tras año acudían a ver este pliegue así como sus profesores se fueron quedando con el nombre de Zaleski y así poco a poco se le fue llamando a este punto geológico de interés singular “El Pliegue Zaleski”.
La imagen que adjunto puede que a muchos lectores les deje totalmente indiferentes. No es más que una peña como cualquier otra, dirán muchos. Sin embargo basta echar un vistazo a la información disponible en la Red; para darse cuenta de que no es una peña como otra cualquiera. Este es un buen ejemplo de como el patrimonio geológico pude dar mucho de si.
Sin duda alguna en muchos de los pueblos de España, hay puntos de interés geológico singular. Yo conozco algunos en el entorno de Bembibre, que bien podrían justificar una visita a alguno de esos diminutos pueblos que están abandonados de la mano de Dios y de los hombres.
Rogelio Meléndez Tercero
