El Atlético Bembibre tuvo que conformarse con un empate en su visita al filial del Mirandés, el mal menor en un partido entre dos equipos en puestos de descenso que necesitan sumar de tres en tres cuanto antes.
El partido, tal como se esperaba, fue muy disputado y con pocas ocasiones. La única de los locales, a los 15 minutos, con un disparo desde la frontal que despejó bien Ivanildo. El Bembibre respondió con un gol de Manu, pero fue anulado por el colegiado al entender que se había producido en situación de fuera de juego.
Tras el paso por vestuarios los dos equipos siguieron con la misma dinámica, mucha disputa y pocas ocasiones. Hasta que a falta de 15 minutos Toni vio la segunda tarjeta amarilla y tuvo que tomar el camino de los vestuarios, dejando en inferioridad a su equipo. Eso lo aprovechó el Bembibre para incrementar la presión en ataque, y a punto estuvo de conseguir la victoria.
Mon volvió a perforar la portería de Carbajo, esta vez en jugada a balón parado, pero el colegiado volvió a anular el gol, también por fuera de juego. Y pocos minutos después, tras un saque de esquina, Íñigo, de cabeza, estrellaba la pelota en el larguero.
Con este resultado el Atlético Bembibre se mantiene una semana más en el farolillo rojo, en espera de la visita de La Virgen del Camino, que no está en su mejor momento, pero tiene el doble de puntos que los bercianos. El talón de Aquiles para el Atlético Bembibre sigue siendo su poca capacidad realizadora -el menos goleador del grupo con diferencia- y eso es lo que le está lastrando a pesar de hacer buenos partidos.
