El consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta, Juan Carlos Suárez Quiñones, ha puntualizado (incluso, contradicho) la información facilitada ayer por el vicepresidente Francisco Igea sobre el inicio de la desescalada. Quiñones da por sentado que el mismo lunes toda la comunidad iniciará la desescalada, lo que implicaría el fin de las medidas extraordinarias como cierre de hostelería de interior, centros deportivos y comerciales.
El consejero leonés asegura que las medidas quedarían sin efecto el mismo lunes día 8 de marzo a las 00.00 horas. Momento en que la comunidad autónoma pasaría a una fase cuatro de desescalada, lo que “permitirá recuperar determinada actividad económica y social, siempre bajo la sensatez, la prevención y la precaución y extremando las medidas”.
En cualquier caso, Suárez Quiñones reconoció que los parámetros sanitarios “no están para pensar que tenemos que tener demasiadas alegrías”, pero entiende apropiado el cambio de fase y las medidas inherentes a la misma. Es decir, la reducción de aforo en interior tanto de hostelería (sin consumo en barra) como en gimnasios y actividad comercial.
Estas medidas, no obstante, no afectarían al toque de queda, que se mantendría a las 22 horas, ni al cierre perimetral.
Muy diferente de la versión que dio ayer el vicepresidente de la Junta que aseguró que la desescalada comenzará de forma gradual por provincias siempre que se den unos condicionantes concretos como la reducción de UCI al 35% y, a nivel provincial, con una ocupación no superior al 25%.
