En la madrugada del viernes fueron colocados dos artefactos explosivos en la puerta de las oficinas de la empresa Viloria, en Torre del Bierzo, y del edificio sindical en Bembibre, donde tienen su sede los sindicatos CC.OO. y UGT. Los artefactos, que no llegaron a explosionar, estaban compuestos por una garrafa de gasolina y un bote de spray utilizado para desencadenar la combustión. Sin embargo, en ambos casos, solo ardieron los botes de spray, evitando una explosión de mayores dimensiones.
Se da la circunstancia que las oficinas de Viloria se encuentran en un edificio donde además vive una familia con su hijo menor de edad, que también podían haber sufrido las consecuencias de la explosión.
En el caso de Bembibre fueron empleados municipales los que se percataron del artefacto cuando examinaron una mochila que en un principio pensaron que había sido olvidada por su propietario. Posteriormente se personaron agentes de la Guardia Civil para sacar huellas y buscar pruebas que puedan ayudar a dar con el autor o autores de los hechos. Desde el sindicato Comisiones Obreras rechazaron pronunciarse, y trataron de quitarle importancia al suceso.
Mientras tanto en Torre del Bierzo no dejó de comentarse lo sucedido a lo largo de todo el día, lamentando y condenando de forma unánime este tipo de hechos.
