El Atlético Bembibre empató a un tanto con el Burgos Promesas, en un partido donde los bercianos merecieron mas. Los atléticos dieron una imagen muy distinta de la que ofrecieron en Salamanca y en León, y aunque se siguen cometiendo errores, como reconoce el técnico berciano, estos se producen en menor medida. También es cierto que se vio una mayor implicación del equipo, mucho mas reconocible.

Isma tuvo que recomponer la defensa ante las numerosas bajas, entre lesionados y sancionados, que no le permitieron tan siquiera completar la convocatoria. Alemán se tuvo que reconvertir en lateral izquierdo, cumpliendo a la perfección, mientras en la otra banda Álex se reivindicaba haciendo un gran partido.

Salió muy bien el Bembibre al terreno de juego, encerrando atrás a un Burgos Promesas con muy buen trato de balón, que intentaba mantener la pelota para quitarse de encima la presión de los bercianos. Isra abrió el marcador a los 25 minutos, con un disparo cruzado que botó delante del portero haciendo imposible la estirada para evitar el gol.

El Burgos Promesas reaccionó y consiguió igualar el partido, que entró en una fase de mayor posesión de balón para los visitantes, aunque no lograban poner en apuros a Ivanildo. Pero en el primer disparo a puerta llegó el empate. Era el minuto 36 cuando Menor se adelantaba a la defensa en un pase lateral para tocar el balón, pillando a Ivanildo a contra pié, e introducrilo en la portería.

En la segunda mitad el encuentro pasó por distintas fases. Los burgaleses se sentían cómodos con el empate, aunque no renunciaban a nada y buscaban la portería de Ivanildo en cuanto tenían ocasión, mientras el Bembibre perseguía decididamente la victoria. Los altéticos hicieron méritos y crearon ocasiones suficientes para llevarse los tres puntos, con un Iván Tato intratable al que solo le faltó acierto en el remate y al que la defensa del Burgos Promesas paraba con continuas faltas ante la imposibilidad de hacerlo de otra forma. Mientras, Yanis daba la de cal y la de arena. A punto estuvo de regalar el partido en un regate innecesario cuando era el último jugador, y poco después hizo volar al guardameta burgalés en un lanzamiento directo que se colaba por la escuadra.

Al final reparto de puntos que no dejó satisfecho a los atléticos, pero que supone una mejoría importante respecto a los dos últimos partidos, en cuanto a actitud, ambición y juego. No es suficiente, hay que seguir mejorando, pero este es el camino a seguir para poder regresar de Palencia con un resultado positivo la próxima jornada.

Trofeo de la Regularidad